Entonces miré hacia arriba y lo vi echado en el sofa con los ojos cerrados y suspirando de gozo diciendome cosas como “si, dale, ah que rico lo haces, mejor que yo” con un brazo estirado en el respaldo dejandome ver su musculo y vello axilar y con el otro en mi cabeza invitadome a mamarsela. Empezaré por describirme: La verdad es que (modestia aparte) estoy muy bueno. Mi piel es blanca pero muy bronceada. Soy de cabello negro y muy chino. Tengo ojos oscuros y todas me dicen que mi cara es hermosa. A mis 15 años aún me falta desarrollarme pues me está saliendo vello en la linea del ombligo a la pelvis y en el pecho pero mi pene circuncidado mide 12 cm flacido y 21 en estado de erección. Tengo unos brazos muy grandes y marcados asà como unos pectorales perfectamente definidos y un abdomen con los cuadritos poco marcados.
Desde hace ya tiempo con mis primos menores, Daniel (14 años) y Pablo (12 años) tenemos la costumbre de escabullirnos en algun cuarto de nuestras casas y ver porno en una lap mientras nos masturbamos, pero nunca habÃa pasado nada más que el ver a la pantalla (miantras yo veÃa sus penes deisimuladamente) y cada quien masturbar su estaca.
Por falta de tiempo, duramos algunos meses sin dedicarnos al pasatiempo y niisiquiera nos veiamos. Hasta que Daniel cumplió 14 años e hizo una pijamada donde solo yo pude ir por que los demás primos tenÃan otros compromisos.
Cuando llegé noté que los meses que no lo habÃa visto le habÃan sentado bien pues se notaba mas musculoso y marcado. El era blanco palido pero con pelo negro y esa clase de hombres me excitan. El chiste es que decidimos ver pornografÃa que yo habÃa descargado en mi lap en la que tenÃa puros trios.
Vimos dos videos cuando decidimos que era hora de masturbarnos. Asà que me quité mis boxers que era lo único que traÃa y me esnte. Luego el se paró muy cerca de mi y le podÃa ver un considerable bulto en su pantalón de la pijama. Se quitó la camisa y entonces pude ver con gran admiración que estaba mucho más marcado de lo que aparentaba y hasta más que yo. TenÃa en su piel blanca unos perfectos abdominales y unos pectorales que habÃan superado a los mios. Al tener los brazos levantados và que le habÃa crecido vello en las axilas y me exité tremendamente. La última vez que lo habÃa visto desnudo, su penes tenÃa tamaño de niño y no habÃa rastro de vello.
Pero entonces se bajó el pantalon junto con los boxers y una tranca de 17 cm (me dijo el) erecta con mucho vellos pero no tanto como los mÃos, saltó de pronto cayendome frente a los ojos provocando una tremenda tentación.
“creció ¿verdad?” me dijo el sobandosela.
Disimuladamente puse un video en el que dos hombres le daban a una mujer pero que en un momento se la jalaban mutuamente. Le pregunté “harÃas eso”
Pero el pueso cara de asco y dijo que no.
SeguÃan en esa parte cuando tocaron a la puerta para decirnos que ya nos durmieramos.
Apagamos todo pero no me pude dormir y me la jalé durante mucho tiempo pensando en mi primo que definitivamente estaba hecho un Dios.
Pasaron cuatro meses para que pudieramos volver a vernos. Organizamos ir a casa de nuestra abuela con el pretexto de ir a ver la pelicula 6 de Harry Potter.
Cenamos, vimos la pelicula y ya entrada la noche nos encerramos en nuestro cuarto y mi abuela en el suyo. Abrimos eol sofa cama y yo prendà mi lap. Me di cuenta de que daniel se habÃa desnudado y dejenme decirles que estaba INCREIBLE. El cuerpo que habÃa visto hacÃa cuatro meses ahora estaba cubierto por más musculo. Todo estaba más grande. Absolutamente TODO. Su pene habÃa alcanzado mi tamaño y tenÃa vello en pecho y abajo del ombligo donde ahora yo tengo.
“¿cuál video pongo?” le pregunte.
“Pon el que no terminamos de ver la otra vez”
Lo puse en la parte donde los dos hombres se jalaban entre ellos sus vergas. Yo no tenÃa esperanzas de que sucediera algo pero luego me dijo: “¿Tu harÃas eso?”.
“La verdad yo si. Sólo para experimentar”
Entonces eo me dijo que si se la querÃa jalar. Yo và su enorme y blanco pene lleno de vellos y me volvà loco. “No que tu no querÃas hacer eso? Dijiste que te daba asco en tu pijamada”
Entonces negó con la cabeza y agarró mi mano y la puso en su tranca. Que cosa tan deliciosa. Empezé un baiben subiendo y bajando mi mano mientras el se recargaba en el sofa y suspiraba con su voz tan varonil. Entonces me agache y me puse frente a su pene para tener una mejor movilidad.
Lo masturbaba con la mano derecha mientras que con la izquierda recorrÃa cada centimetro de sus bien muusculosas piernas que tambien estaban exageradamente blancas. Luego acariciaba sus bolas y subia por la pelvis a sus abdominales antes de encaminar mi mano a lo que alcanzaba de sus brazos y terminé en sus pezones, donde me entretube buen rato. Entonces miré hacia arriba y lo vi hechado en el sofa con los ojos cerrados y suspirando de gozo diciendome cosas como “si, dale, ah que rico lo haces, mejor que yo” con un brazo estirado en el respaldo dejandome ver su musculo y vello axilar y con el otro en mi cabeza invitandome a mamarsela. Esa imágen me hizo delirar y entonces và mi mano acariciando su pene. La quité y acercé lentamentemi boca abierta para mamarsela. SentÃa como mis labios ingerÃan milimetro a milimetro y con mucha tardanza su tranca mientras pasaba mi lengua por lo que ya tenÃa sumergido de su pedazo de carne blanca.
Miré su cara con todos su centimetros dentro y entonces me empujó haciendome caer de espaldas en el suelo
Pensé que habÃa terminado todo ahÃ. Pero que equivocado estaba, era sólo el comienzo.
