Desde hace siglos, nuestra sociedad se ha dividido de manera muy estricta en dos géneros: hombres y mujeres. Cada persona quedaba incluida en uno de estos dos grupos desde su nacimiento. Por tanto, según este manual clásico, los hombres debían sentirse atraídos por mujeres, y las mujeres, por hombres. Sin embargo, la sexualidad humana es mucho más amplia, y aquí es donde entran en juego diversas ramas, como la pansexualidad.
La evolución de la sexualidad humana
Así, si una persona nace con los órganos sexuales masculinos, se le incluiría dentro de esa condición. Lo mismo pasa con las mujeres. Según esto, en la sexualidad humana solo existen dos posibles opciones. Dos colores: el blanco y el negro.
Por suerte, a medida que nuestra sociedad ha ido avanzando, hemos ido tomando conciencia del gran abanico de opciones reales que existen en el campo de la sexualidad. Ese espectro de dos colores ha evolucionado en un mayor número de tonalidades, de manera que la condición sexual de cada individuo se ha particularizando cada vez más.
De esta manera, hoy en día ya podemos diferenciar entre heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad, transexualidad, pansexualidad, etc. Así, las formas de atracción hacia otros individuos, sean o no del mismo sexo, son muy variadas.
La pansexualidad dentro de las relaciones humanas
La pansexualidad es una condición sexual caracterizada por la atracción física y sentimental hacia un individuo, independientemente de su sexo. Por ello, la pansexualidad se puede considerar como la forma más libre y elemental en la que se pueden concebir las relaciones entre los seres humanos. Al menos es de las que, a priori, hay menos reglas fijadas.
Este tipo de orientación sexual no “juega con cartas marcadas”, por lo que pueden ser partícipes de ella tanto los individuos pertenecientes a géneros binarios -quienes no se sienten identificados como hombre ni como mujer- como los no binarios.
La diferencia entre la pansexualidad y la bisexualidad
Ante estas definiciones, la diferencia entre la pansexualidad y la bisexualidad puede resultar algo confusa. La principal característica de la pansexualidad es que, como hemos comentado, esta engloba a los géneros no binarios.
Alguien bisexual es, en definitiva, una persona que puede sentirse atraída por personas de ambos sexos, tanto por hombres como por mujeres. De esta forma, las personas bisexuales asocian a cada persona con una carga de género, de manera que las mujeres son femeninas y los hombres son masculinos. Por tanto, los bisexuales siguen reconociendo la existencia del género asociado a cada sexo como algo importante en su atracción hacia ellos.
Por otro lado, los individuos pansexuales no tienen en cuenta ni el sexo ni la forma en que cada sujeto se amolda, en mayor o menos medida, a uno u otro género. Sencillamente, alguien pansexual siente unaatracción física y sentimental por una persona, más allá de su carga de género.
Una orientación sexual desconocida
Debido a la dificultad para entender este tipo de orientación sexual, y a la relativa novedad del término, la pansexualidad es habitualmente desconocida. A menudo se considera como una idea más romántica que la heterosexualdiad o la homosexualidad, y como algo más idílico que real.
Por esto, no es raro que mucha gente considere la pansexualidad como una moda, ya que no es algo que se encuentre fácilmente en el folclore, como los estereotipos que pueden encontrarse sobre la comunidad gay. De esta forma, muchas personas consideran que la pansexualidad no es una auténtica orientación sexual, y tan solo es una forma de llamar la atención o un intento de distinguirse de los demás.
La pansexualidad en nuestro tiempo
Hoy en día pueden encontrarse varias referencias a la pansexualidad en la cultura del cine, la literatura o la televisión. A modo de ejemplo, varios personajes de la famosa serie de ciencia ficción “Doctor Who” se han definido como pansexuales. La trama de la serie tiene lugar en un futuro caracterizado por los avances en todos los sentidos. Dentro de este universo, el personaje de Jack Harness no clasifica a las personas en hombres o mujeres.
Por otro lado, la pansexualidad también ha aparecido en la afamada serie de televisión “Sexo en Nueva York”, hablando de ella como la sexualidad del nuevo milenio. En el mundo del cómic también pueden encontrarse personajes creados en relación con este tipo de orientación sexual. Este es el caso de Wade W. Wilson, también conocido como Deadpool.
Este famoso antihéroe del universo Marvel es un ejemplo de pansexualidad. Aunque sea debido a causas relacionadas con la ciencia ficción, el personaje no se identifica con ninguna otra orientación sexual concreta y siente atracción por cualquier persona, independientemente de su género o sexo.
