Hola a todos, quería desahogar esta experiencia que nunca olvidare, pues creo que todos los que somos Gay de Closet, hemos estado enamorados de algún amigo hetero y con el miedo de no poder decir nada, porque nadie sabe que eres gay.
Bueno, el personaje de mi historia se llama David, a él lo conocí en la escuela, estaba cursando séptimo grado cuando él entró, venía de otra ciudad, era el chico nuevo, por ende, casi no tenía amigos, típico, se hizo amigo de los chicos más idiotas del salón, es normal que los hetero siempre se junten con brutos.
Al principio lo acepto, no le tome importancia, no lo veía guapo, él tenía como 14 años y yo 15.
Así pasó el tiempo y aun no hablaba con él.
Llego el tercer año, casi para graduarnos, cuando iniciaban las clases, lo típico mis amigos y los demás con los que sabía que tocaría otra vez, pero ¡vaya sorpresa! David también quedo en el mismo salón, pero es ahí donde ya me robo la mirada, era otro David, fue como que si el fin de año lo hubiera cambiado, lo veía más alto, algo musculoso y woow su carita súper linda, pues ya tenía 17 años, ya estaba entrando en la adultez, ya casi era un hombre, por lógica, me comenzó a gustar y sentía interés en conocerlo, pero no sabía cómo acercarme sin que me viera súper gay, ya que todos sabían que no le hablaba.
Comencé por lo común, hola, ¿qué tal? y que te vaya bien.
Fue hasta en una ocasión que nos castigaron a ambos y nos enviaron a recoger las hojas secas que caían de una enorme ceiba, estuvimos bromeando, que por una cosa insignificante ya te castigaban.
Así empezó nuestra amistad, que hasta la fecha sigue intacta.
Bueno ya entrando en lo que quiero contarles, con él siempre tuve confianza de hablar cualquier cosa sobre sexo o el cuerpo masculino, (él piensa que soy hetero, bueno todos mis amigos de infancia piensan eso) la cosa es, que por eso él también me contaba todo sobre su cuerpo y estado sexual, como él era menor, cuando comenzamos hablar de eso, fue porque él aún era virgen y yo pues ya había tenido sexo, eso le despertó un gran interés y me preguntaba cosas (yo soy bisexual, así que, podía hablar libremente del cuerpo de una mujer) él acostumbraba a masturbarse todos los días, pues era demasiado activo, por cualquier cosa se excitaba, por esas detalles que me decía, tenía la duda de cuanto le media su pene, pues siempre se le marcaba un gran bulto, no importaba que tipo de ropa fuera, siempre se le marcaba un enorme bulto, por mi experiencia pensaba que bien que tuviera un pene gordo o sus huevos eran muy grandes y eso hacía que el pene se le marcara.
La cosa es que el conocimiento es poder y según leí los penes que son muy pequeños en estado flácido, en erección crecen considerablemente y los penes que son algo grandes en estado flácido, al entrar en erección no cambian mucho, simplemente se ponen duros en ese mismo tamaño.
Lo cual le creo que es cierto, pues yo soy algo así, mi pene cuando está flácido es súper pequeño, pero nada que ver erecto, tengo casi 21 cm.
Yo moría por saber, pero nunca tenía valor de tocar el tema sobre el tamaño de los penes, porque era un tema demasiado gay, en mi país esos temas son muy evitados entre heteros, es un país muy machista.
Bueno en cuanto fue creciendo la confianza, comenzamos a bromear de tocarnos las nalgas, woow eso lo disfrute como no tienen idea, para que se hagan una idea les voy a describir como era David, era es un chico alto de 1.79, piel morena, cabello negro, el desgraciado tiene una cara muy bonita y una mirada muy seductora, los rasgos de su barbilla son bien definidos, era delgado, pero tiene unas hermosas nalgas y unas fuertes piernas, pues siempre ha jugado fútbol, unas pantorrillas fuertes y es velludo del abdomen y de las piernas, en total desde el abdomen para abaja es un oso y eso me encanta de un hombre.
Siguiendo, comenzamos a bromear de tocarnos las nalgas con él y otros amigos, pero en ellos no sentía mucho interés, poco a poco nos fuimos soltando ese mismo grupo y nos tocábamos como si fuéramos “maricas, supuestamente bromeando e imitando” hasta que llegó el momento y comenzamos a tocarnos los genitales, fue cuando aproveche a tocarle todo a David y en efecto tiene unos enormes huevos de macho latino, que hasta agua se me hace la boca de solo pensarlo, disfrutaba agarrarle los huevos, su pene se sentía algo grande, pero variaba un poco su tamaño en estado flácido, lo más grande que se lo llegue a sentir fue quizás de unos 10 cm erecto y también comprobé que si tiene gordo su pene, me mataba yo solo imaginando cómo sería su pene erecto.
Siempre hablábamos de sexo, de cómo nos gustaba tener sexo, en ese entonces David ya había perdido la virginidad con una ex novia, acepto que me dieron un poco de celos, pero eso ayudo, pues David comenzó a ser más caliente y solo de sexo pasaba hablando y así bromeamos pues siempre le pasaba tocando las nalgas.
“LA PRIMERA VEZ QUE VI SU PENE”
Ya éramos adultos, estábamos en casa de un amigo, fue la primera vez que tomamos alcohol juntos, ya nos habíamos acabado una botella, David era la primera vez que tomaba, andaba súper alocado y bromeada a lo brusco, la verdad sentía feo aprovecharme de él en ese estado, pues nunca lo había hecho y es mi mejor amigo, me daba miedo perderlo.
Así que fui más inteligente y lo provoque, para que él solito se dejará, cuando estaba bien ebrio lo comencé a molestar diciéndole que él no le hacía ni cosquillas a su novia, que tenía un pene pequeño, espere que Jorge mi otro amigo subiera a buscar otra botella para joder más a David, cuando Jorge subió, lo comencé a molestar más y lo rete a que me enseñara lo que tanto presumía, nunca imaginé que me iba hacer caso y boom que David se pone de pie frente a mí y se bajó el pants y voy viendo unos enormes huevos morenos depiladitos y su verga gorda con pelos en la pelvis, quede súper impactado, pues David con solo 18 años tenía unos genitales enormes, como que si fueran los de un hombre maduro, sus huevos eran los más sabrosos que había visto.
Fue tan intenso que me dio una erección instantánea, cuando me fije que venía Jorge, medio fingí que le pegaba en los huevos para que se subiera el pants, pues Jorge no andaba tan ebrio y se podía mal interpretar.
David se subió el pants y me dijo, “ahora me crees de la gran vergota que tengo”, moria por decirle que la cosa es ver cómo la tenía parada (erecta) pero ya no pude seguirle el juego porque ya estaba Jorge ahí, (maldito lo odie con todas mis fuerzas).
Así fue como logré ver el pene de David, eso me dejo con una calentura que nadie me quitaba, yo soñaba con David, él era el autor de mis sueños húmedos y el motivo de mis masturbadas cada día.
“COMENCÉ A TOCAR SU PENE SOBRE LA ROPA”
Ya como iba avanzando el tiempo, ya éramos adultos jóvenes, solo hablábamos de sexo y de las veces que andamos calientes y nos tocaba masturbarnos para bajar el calor.
Y salió esa broma de ¡Preguntan por vos! Y si te decían ¿Quién? Tú te agarrabas el paquete y le respondes ¡Esta!.
Así fue cuando ya con todo el atrevimiento del mundo y con una gran confianza, siempre que me decía eso, yo le agarraba el paquete y se lo apretaba, entre heteros eso es de alguna forma súper gracioso, para mí era delicioso, por eso siempre que David me decía eso, para yo se la agarra, poco a poco fui agarrando más confianza y no solo lo tocaba así en broma, le agarraba su bulto y lo acariciaba por varios segundos y podía sentir perfectamente su gordito pene dormido y sus enormes huevos, David no me decía nada, porque pensaba que era todo un juego.
Buscaba la forma de hacer eso cuando andaba en ropa deportiva para poder sentir mejor sus partes.
“LLEGO EL DIA QUE PUDE CHUPARLE EL PENE A DAVID”
Ya éramos adultos y a poco tiempo de ir a la universidad, como todos buenos amigos, los sábados nos íbamos a tomar, pero como era en discotecas, no tomábamos a quedar muertos, pues teníamos que regresarnos, hasta que comenzamos a quedarnos en la casa de un amigo, que la mamá trabajaba de noche, ahí si comenzamos a tomar a quedar muertos, poco a poco, fui notando que David en ese estado era súper manejable, lo tocaba y le hacía casi de todo (sobre la ropa) y él no decía nada, solo le daba risa.
Sabía que tenía poco tiempo, pue estábamos a unas semanas de graduarse e ir a la Universidad y ahí cada quien tomaría su camino y estas reuniones se acabarían.
La última vez que nos quedamos donde mi amigo, yo saque mis dotes actorales, habíamos ido a cenar y fingí que la comida me había caído mal, “vomite” y decía que me dolía mucho la cabeza, así que me tome unas pastillas “no lo hice” como supuestamente andaba medicado, no tome con ellos, les dije que solo los iba acompañar, obvio no se enojaron y todo iba bien.
Así pasaron tomando, hasta como las 2:00 de la mañana, mi amigo se quedó dormido en el sofá, David se estaba durmiendo en el suelo, le dije que se levantara, que si se quedaba ahí, le iba a doler el cuerpo mañana, así que como pude me lo lleve al cuarto de mi amigo, ya para ese entonces, David era un hombre, alto de 1.
87 y algo musculoso, pesaba muchísimo, me costó llevarlo al cuarto.
Todo comenzaba a funcionar según mi plan, e incluso tuve un plus, pues cuando lo llevaba me dijo que lo ayudaba a ir al baño, quería orinar, él me puso el brazo en mi hombro, le dije que si lo soltaba se iba a caer, así que, lo lleve hasta el baño, encendí la luz y él se bajó la calzoneta y comenzó a orinar, pude ver su bonito y gordito pene orinando, se me hacía agua la boca de ver esa gran cabeza pelada y como rosadito oscuro (David es moreno) por eso su pene es como color chocolate y la cabeza como rosadita, andaba medio peludo y eso hacía que se le viera monstruosa su verga.
POR FIN, me lo pude llevar a la cama, le dije que si tenía calor que se quitara la camisa, y me hizo caso, estaba que prendía en fuego al ver al macho de mi vida semi desnudo frente a mí, se recostó y espere como media hora a que se durmiera, en todo eso, fui a la sala a ver si mi amigo se podía despertar y no, dormía profundamente, cuando por fin, fui al cuarto, mire a David acostado y durmiendo y me valió madres la vida, cerré con seguro la puerta y me desnude, me recosté a su lado moviéndolo a ver si despertaba, pero estaba súper borracho y dormía profundamente, y me decidí darle un beso en los labios, sentí que el cuerpo me prendía en llamas, no aguante y lo comencé a besar de lengua, le chupaba los labios, tocaba su lengua con la mía, su boca sabía a whisky.
Bese cada parte de su moreno y ardiente cuerpo, dejando para el final el postre, le besaba todo el cuerpo, esperando estimularlo y con la esperanza de que se le pusiera duro el pene, hasta que me tire encima de él, como vil perra y con mi pelvis rozaba la de él y le comencé a besar el cuello lentamente y fue cuando sentí como su bulto iba creciendo, woow hasta se me eriza la piel y se me para el pene de solo recordarlo.
Hasta que ya no aguante más, y le quite la calzoneta y el bóxer y Wooooo tenía al hombre de mi vida desnudo en la cama, la boca se me hacía agua de ver esa enorme verga peluda y de chocolate estirada en todo su sexy abdomen peludo, comencé a besarla desde la punta hasta llegar a sus enormes huevos de macho, con mis besos esa verga comenzó a crecer más, hasta que se paró de tan dura que estaba, era como un regalo de los ángeles del sexo.
No aguante más y le baje el prepucio dejando toda esa gran cabeza pelada y caliente, que ya tenía una pequeña gota de pre seminal.
Cuando por fin me la meto en la boca y siento ese delicioso sabor a verga de macho hetero en mi lengua, se la chupaba como una vil puta hambrienta, poco a poco, comenzó a expulsar más líquido pre seminal y era un manjar chuparlo todito y sacarlo con mi lengua, su verga era tan gruesa que solo la cabeza me cabía en la boca, pero como toda una perra, trataba de meterme un poco más, hasta que logre llegar a la mitad de su verga, yo la chupaba sin parar, mientras le jalaba los huevos con una mano y con la otra le tocaba el abdomen musculoso que tenía, estaba totalmente en la gloria, quería que ese momento no se acabara; de repente le toque la cabeza de la verga con los dientes y se movió, sentí que la vida se me fue en unos segundos, pensando que se había despertado, pero solo movió una pierna, fue horrible, si ese hombre hubiera despertado, no sé qué iba a pasar, si los dos estábamos totalmente desnudos y yo tenía su pene erecto en la mano y llena de saliva.
Lo comencé a masturbar suavemente, a besar y chupar su rico pene, no lo quería soltar, miraba su delicioso cuerpo desnudo, me tiraba sobre él, para sentir su calor corporal.
A como pude le abrí las piernas para ver su culo, que era hermoso y peludo, tenía un ano tan delicioso y socadito, moría por pasarle la lengua, pero me daba miedo que se despertara, así que mejor solo lo vi y me masturbe viéndolo.
Tuve la intención de sentarme en su verga y que fuera él quien me quitara la virginidad del ano, pues siempre he sido activo y si probaba eso, que mejor que fuera mi mejor amigo hetero, para que me rompiera el culo.
Me estuve dilatando el ano, me ponía saliva y me metía los dedos, para que no me doliera, nunca había hecho eso y peor si me iba meter tremenda verga gorda; cuando ya sentí que me podía caber, le chupe la verga para que se pusiera durita y con gran miedo que no se despertará, me senté y con toda la fuerza de mi alma me logre meter solo la cabeza, y aun así sentí el dolor más terrible de toda mi perra vida, nunca había sentido tremendo dolor y trate de meter un poco más su verga, pero era demasiado dolor y mejor lo deje así, fue hermoso pensar que mi amigo me había desvirgado el culo con su verga gorda.
Estaba con la intriga, si chuparle la verga hasta que se viniera, pero me daba miedo que con eso se despertara, al final solo me quede a su lado chupando su verga y que pasara, lo que tenía que pasar, estuve como media hora chupando su pene y disfrutado de su sabor y del liquido preseminal, hasta que cuando menos sentí fue el bombazo en mi boca, de una gran cantidad de semen caliente, que fue tan de sorpresa, que me lo trague todito, chupe esa cabeza hasta que no quedo ninguna sola goda de su delicioso semen, seguía chupándosela cuando de repente se movió, quizás por la sensibilidad en la cabeza, se movió y se puso boca abajo, fue como una despedida ver su rico culo peludo, mientras lo veía me di la última masturbada que corría a chorros de semen.
Me recosté sobre él un rato, le deje mi pene entre sus nalgas y así estuve un tiempo, hasta que ya me dio sueño, mejor me cambie y busque la forma de cómo ponerle otra vez el bóxer y la calzoneta, lo limpie con unas toallitas húmedas y lo deje dormir, para eso, se nos hicieron casi las 4:30 de la madrugada, lo deje dormir, le quite el seguro a la puerta y me acosté en la otra cama y me dormí, bien cogido (bueno ni tanto, pero ya con el culo roto y un gran dolor) pero súper satisfecho de su pene.
Fue hasta ya tipo 1:00 de la tarde que nos despertó mi amigo, para que comiéramos, cuando me senté en la cama sentí un gran maldito dolor en el culo, me ardía y sentía que me palpitaba de dolor, eso era como un recordatorio de lo que hice y que mi culo me dijera, “Si paso, David te cogió” David también se despertó, no se quería ni parar de la resaca que tenía, decía que la cabeza le explotaba y que solo quería dormir.
Al final nos levantamos, nos bañamos y fuimos a comer, no habíamos comido nada y el estómago me dolía, le dije a David que me dolía el estómago y con una voz súper rara me respondió: “Saber que comiste anoche” se me fueron los colores, pensando que quizás estuvo despierto y se dio cuenta de todo.
Actué normal y solo le dije que nada, si hasta vomite la cena que no te recuerdas y ya con su cara toda bonita y pendeja me dice “a es cierto, puta yo no me acuerdo de nada, hoy si me puse una bien buena” ahí ya pude respirar tranquilamente.
ASÍ FUE COMO TUVE ESA EXPERIENCIA CON MI MEJOR AMIGO DAVID, QUE NUNCA LA OLVIDARE, AHORA YA ESTAMOS EN LA UNIVERSIDAD, CADA QUIEN EN DIFERENTE LUGAR, LO VEO POCAS VECES, YA TIENE UNA NOVIA Y VIVEN JUNTOS, AUN ACEPTO QUE ME DAN UN POCO DE CELOS, PERO YA DESPUES DE ESO FUE COMO QUE, “YA LO PROBASTE, PUES DEJALO IR” Tal vez en un futuro no muy lejano pueda decirle lo que soy y así sentirme más feliz con la aceptación de mi mejor amigo hetero.
Un comentario:
Alejandro
mayo 1, 2020 at 3:58 pm
Hola! Como vas? Oye tu relato estuvo a la altura, realmente lo disfrute. Si deseas intercambiar más relatos con héteros y experiencias morbosas puedes escribirme al correo. Me gustó la manera en que redactas y describes los hechos. Cuídate