Los Gemelos ardientes
Una noche de viernes decidimos ir a tomar unos tragos y a cenar con gente de mi oficina.
Normalmente yo soy reacio porque prefiero no juntarme con gente cuadrada, porque me conozco que con un par de tragos mi ya excepcional libido crece enormemente,
pero ya habia rechazado muchas invitaciones y esta la tenia que cumplir.
Parti con el grupo dispuesto a regresarme temprano, para ir a levantarme algun chico luego ya sea en la calle en un bar gay y tener el tipo de fiesta que a mi me gustan: vergas, culos, mamadas, cogidas, etc.
Estando en el lugar, al principio me confundi con los meseros, habían dos iguales,
eran hermanos gemelos. Realmente atractivos aproximadamente 180 cm, unos 80 kilos cada uno, espaldas anchisimas y brazos gruesos y fuertes,
ambos tenian la cabeza rapada y rasgos duros muy masculinos.
Al verlos se me hizo agua el culo, y no disimule, algo asi es lo que me habia recomendado de mi siquiatra para botar todo el stress de mi agotador trabajo.
Asi que los miraba descaradamente, uno de ellos comenzo a sobarme su pija contra mi hombro cada vez que me servia, me encantaba la sensacion.
Comenze a tomar mas tragos de los que debia, y mi excitación crecia, ahora el tipo bajaba su cabeza y sentia los soplidos calientes de su respiracion.
Cuando pude le hice señales para encontrarlo en el baño, y efectivamente el tipo me respondio.
Alli me mostro su arma, era un muñeco entero, no menos de 30 centimetros, gruesa como una botella de cerveza, su cabeza rosada humeda por la excitación que le habia provocado el roce con mi hombro,
alli mismo la probe rapidamente, deliciosa, el precum habia sazonado el olor a orina del dia, y estaba salada y caliente.
El tipo me separo y me dijo aquí no debemos, pero salgo a las 2:30, pero pasa por nosotros a las 3 en la estacion de servicio una cuadra mas abajo.
Cuando me dijo eso yo quede impactado.
Como nosotros pregunte? Si me dijo, yo me voy con mi hermano…o no nos quieres a los dos contigo? Para mi eso era el cielo, verga por partida doble, y de ese tamaño.
Yo estaba puntual y alli estaban ambos. Ahora en ropa de civil se veian aun mejor.
Ambos en jeans y T shirt mostraban sus musculos, y el paquete enmedio de las piernas se magnificaba, un manjar de dioses. Subieron a mi auto, y fuimos a mi apartamento.
Al momento estaba idiotizado por esos hombres y mi libido ya no me permitia calcular los riesgos.
Llegamos a casa y me desnude al momento que les ofrecia trago.
Ellos apreciaron mi cuerpo, nada despreciable, yo mido tambien 180 cm y peso 90 kilos de solidos musculos en un cuerpo moreno velludo.
Al servirles los tragos me jalaron hacia el sofa donde estaban y ambos me besaron en la boca,
la sensacion de sus lenguas simultaneas en mi boca y sus manos asperas acariciando mi cuerpo sin ninguna restriccion hizo vomitar precum a mi ya rigida pija.
En momentos estaban ambos completamente desnudos colocaron sus vergas juntas de forma que fueran mamadas simultaneamente, que reto si una sola era bastante para mi boca, dos era una tarea francamente imposible,
sin embargo mi experiencia y mi deseo me decian que yo podia con la tarea y que nos los defraudaria, comenze a mamar esos solidos macizos de masculinidad sin tregua,
los saboreaba intensamente, excitado como la gran puta que me sentia en ese momento, queriendo saborear la lechede los hermanos,
sin embargo para que negarlo me era imposible metermela las dos a la par, como a mi me hubiera gustado, enteras las dos vergas cogiendo mi garganta.
Asi que de pronto uno de ellos, se paro ensalivo mi culo y empujo su espada dentro de mi hambriento y caliente orificio trasero, ahora si podia moverme con facilidad y que maravilla dos vergas exactamente iguales cogiendome por los dos extremos de mi cuerpo,
mientras eso ocurria los hermanos se acariciaban mutualmente sus tetillas y se unian en un largo e intenso beso frances. Luego los hermanos cambiaron posiciones,
nunca logre descifrar quien era quien, la sensacion que me producian era tan intensa que mi verga empezo a vomitar cantidades de leche sobre el piso,
al ver esto los hermanos reaccionaron y volvieron mas violenta su cogida, el que estaba por detras se solto y puso su pija en mi boca tambien,
en pocos segundos depositaban el caliente jugo que antes albergaban sus poderosos y redondos huevos.
Era tanta que se derramaba de mi boca, yo me tire al piso y lami lo que se habia caido junto con mi propia leche derramada.
Yo pense que los habia dejado satisfechos, pero no, sus relucientes espadas aun descubrian su magnitud completa, y me dijeron que lo que ellos querian era cogerme simultaneamente por el culo.
Al ver la inmensidad en que se convertian sus dos pijas juntas no me atrevia.
Un amigo y yo nos habiamos cogido a otro antes de esa manera, pero nuestra vergas juntas no llegaban a las dimensiones del trozo de carne que mi culo se comeria.
Sin embargo, pense que no tratarme de arrepentiria toda la vida, asi que hice de tripas culo, y busque un bote de aceite de bebe y lo verti sobre ambas vergas,
ambos estaban acostados con sus organos en su maximo esplendor mientras yo los masajeaba y me untaba el culo con cantidades de aceite.
Probe primero con una sola para acostumbrar mi culo, que aunque habia sido cogido recientemente estaba en proceso de cerrarse, trate de concentrarme lo mas posible para relajar mis musculos,
alternaba las vergas para que ambos sintieran placer y sus garrotes no se encogieran,
finalmente me introduje las poderosas colas de simultaneamente, el dolor y la presion eran intensos, pero asi era el placer, cabalgue por sobre ese kilo de carne erecta sin descanso,
ahora queria hasta los huevos de ambos adentro, ya no me bastaban las pijas calientes y lechosas, queria mas y lamente que no fueran trillizos.
Mi culo estaba completamente satisfecho, y la presion que ejercian ambas vergas sobre mis prostata era una satisfaccion que tenia mi verga explosando leche constantemente,
luego de lo que pudo haber sido una hora de pelea senti que ambas vergas se venian dentro de mi, yo ya no me pude venir porque todo el acto fue una venida permanente,
mis huevos estaban completamente vacios, me habian extraido todo.
Finalmente nos quedamos dormidos, no sin antes besarnos apasionadamente, yo dormi entre esos dos hombres oliendo y lamiendo sus cuerpos sudorosos.
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