El chavo está bien nalgoncito, guapito, muy bonito cuerpo y siempre parecía disponible. En el gimnasio, en algunas rutinas me acercaba su cuerpo y sentía su juventud cuando apretaba sus nalgas contra mi pene. Era cuestión de tiempo para que cogiéramos, pero quería escoger el mejor momento para proponérselo. Era mi instructor y siempre estaba […]